25 años de The Legend of Zelda: Ocarina of Time
The Legend of Zelda: Ocarina of Time es uno de los juegos más influyentes y aclamados de la historia de los videojuegos. Se trata de la primera entrega de la saga Zelda en 3D, que revolucionó el género de la acción-aventura con su innovador sistema de combate, su mundo abierto, su banda sonora, su historia y sus mazmorras. Este año se cumplen 25 años desde su lanzamiento original para Nintendo 64, y queremos celebrarlo repasando algunos de los aspectos más destacados de este clásico atemporal.
La historia de Link y Zelda
La trama de Ocarina of Time nos lleva al reino de Hyrule, donde el joven Link vive en el bosque Kokiri junto a su hada Navi. Un día, el Gran Árbol Deku le encomienda la misión de detener al malvado Ganondorf, el rey de los Gerudo, que busca hacerse con el poder de la Trifuerza, una reliquia sagrada que concede los deseos de quien la posee. Para ello, Link debe viajar por Hyrule y reunir las tres piedras espirituales que le permitirán acceder al Templo del Tiempo, donde se encuentra la legendaria Espada Maestra, el arma capaz de derrotar a Ganondorf. En su aventura, Link se encontrará con la princesa Zelda, la guardiana de la Trifuerza de la Sabiduría, que le ayudará a descubrir los secretos de la ocarina del tiempo, un instrumento mágico que le permitirá viajar entre el pasado y el futuro.
La historia de Ocarina of Time es una de las más complejas y profundas de la saga Zelda, ya que explora temas como el destino, la amistad, el sacrificio, el amor y la madurez. Además, introduce el concepto de la línea temporal dividida, que dará lugar a diferentes secuelas y precuelas según las acciones de Link en el juego. Algunos de los personajes más memorables de la saga, como Sheik, Impa, Ruto, Darunia, Nabooru o Saria, hacen su primera aparición en este juego.
El sistema de juego
The Legend of Zelda: Ocarina of Time fue pionero en muchos aspectos del sistema de juego de los juegos de acción-aventura en 3D. Uno de ellos fue el sistema de apuntado automático, que permitía a Link enfocar a un enemigo o a un objeto con solo pulsar un botón, facilitando el combate y la resolución de puzles. Otro fue el sistema de botones contextuales, que asignaba diferentes acciones a los botones según la situación, como hablar, abrir, empujar, saltar o usar objetos. Esto hacía que el control fuera más intuitivo y dinámico.
El juego también se caracterizó por su gran variedad de objetos y armas, que Link podía usar tanto para luchar como para explorar. Algunos de los más emblemáticos son el arco, el gancho, las bombas, el bumerán, el martillo, las botas de hierro, las botas flotantes, el látigo, las semillas mágicas o las máscaras. Cada objeto tenía su propia función y utilidad, y algunos podían combinarse entre sí para crear nuevos efectos. Por ejemplo, Link podía usar el arco con las flechas de fuego, de hielo o de luz, o usar el gancho con las bombas para lanzarlas a distancia.
Otro elemento clave del juego era la ocarina del tiempo, que Link podía tocar en cualquier momento para activar diferentes efectos. La ocarina tenía doce notas, que se correspondían con los botones del mando, y Link podía aprender hasta trece canciones, que le servían para viajar en el tiempo, teletransportarse, cambiar el clima, invocar a Epona, su fiel yegua, o comunicarse con otros personajes. Algunas de las canciones más famosas son el Bolero de Fuego, la Canción de las Tormentas, la Canción del Tiempo o la Canción de Saria.
El mundo de Hyrule
Ocarina of Time presentó un mundo de Hyrule más grande y detallado que nunca, con una gran variedad de escenarios, personajes, secretos y misiones secundarias. El juego se dividía en dos partes: la primera, cuando Link era niño, y la segunda, cuando Link era adulto, tras haber dormido durante siete años en el Templo del Tiempo. Cada parte tenía sus propias características y diferencias, y Link podía viajar entre ellas usando la ocarina del tiempo y la Espada Maestra.
El mundo de Hyrule estaba formado por diferentes regiones, cada una con su propia cultura, clima, flora y fauna. Algunas de las regiones más destacadas son el Bosque Kokiri, el hogar de los niños del bosque; el Valle Gerudo, el territorio de las ladronas del desierto; el Dominio Zora, el reino de los seres acuáticos; el Poblado Goron, la montaña de los gigantes de roca; el Lago Hylia, el mayor lago de Hyrule; el Castillo de Hyrule, la sede del rey y de la princesa Zelda; o el Mercado de Hyrule, el centro comercial y de ocio de la ciudad.
El juego también contaba con diez mazmorras, que eran lugares llenos de enemigos, trampas, puzles y jefes finales, donde Link debía conseguir un objeto especial o liberar a un sabio. Cada mazmorra tenía su propia temática y dificultad, y requería el uso de diferentes objetos y habilidades. Algunas de las mazmorras más recordadas son el Templo del Bosque, el Templo del Fuego, el Templo del Agua, el Pozo de las Sombras, el Templo de las Sombras o el Templo del Espíritu.
La banda sonora
La banda sonora de Ocarina of Time fue compuesta por Koji Kondo, el compositor principal de la saga Zelda. La música del juego se adaptaba al ambiente, al lugar y a la situación, creando una atmósfera única e inmersiva. El juego contaba con más de 80 temas musicales, que abarcaban desde melodías tranquilas y relajantes hasta temas épicos y dramáticos. Algunos de los temas más populares son el Tema Principal, el Tema de Hyrule, el Tema de Ganondorf, el Tema de Zelda, el Tema de Sheik, el Tema de la Batalla Final o el Tema de los Créditos.
La música del juego también tenía un papel importante en el sistema de juego, ya que Link podía tocar la ocarina del tiempo para activar diferentes efectos. Cada canción que Link aprendía tenía su propia melodía y significado, y algunas de ellas se han convertido en iconos de la saga Zelda. Por ejemplo, la Canción de Epona, que le permitía llamar a su yegua; la Canción del Sol, que le permitía cambiar de día a noche y viceversa; o la Canción de las Tormentas, que le permitía provocar una lluvia torrencial.
El legado de The Legend of Zelda: Ocarina of Time
Ocarina of Time fue un éxito tanto de crítica como de público, y se convirtió en uno de los juegos más vendidos de la historia, con más de 7 millones de copias vendidas en todo el mundo. El juego recibió numerosos premios y reconocimientos, y ha sido considerado por muchos medios y jugadores como el mejor juego de todos los tiempos. El juego tiene una puntuación de 99 sobre 100 en Metacritic, la más alta de la historia.
El juego también ha tenido una gran influencia en el desarrollo de los videojuegos posteriores, especialmente en el género de la acción-aventura. Muchos juegos han tomado inspiración o han hecho referencia a Ocarina of Time, como Okami, Shadow of the Colossus, Dark Souls, Horizon Zero Dawn o Breath of the Wild, entre otros.