¿Adiós a los Bizum? La UE sentencia al método de pago al hacer que todas las transferencias sean gratis e instantáneas

Bizum es una de las aplicaciones más populares en España para enviar y recibir dinero entre particulares. Su éxito se basa en la rapidez, la facilidad y la gratuidad de sus operaciones, que se realizan en apenas unos segundos y sin comisiones. Sin embargo, este servicio podría verse amenazado por una nueva normativa de la Unión Europea (UE) que obligará a todos los bancos a ofrecer transferencias gratuitas e instantáneas a sus clientes.

La medida, que fue aprobada el pasado 8 de febrero de 2024, tiene como objetivo armonizar el mercado de pagos en la zona euro y facilitar la competencia entre los proveedores de servicios de pago. Según la normativa, los bancos tendrán que adaptar sus sistemas para que puedan recibir pagos instantáneos en un plazo de nueve meses desde su publicación en el Diario Oficial de la UE, y para que puedan realizarlos en un plazo de 18 meses. Además, se establece que las transferencias no podrán tener un coste superior al de las transferencias estándar, que actualmente son gratuitas en la mayoría de los casos.

¿Qué implica esto para Bizum?

Según algunos expertos, la aplicación podría perder parte de su atractivo si los bancos ofrecen un servicio similar sin necesidad de descargar ninguna app ni registrarse en ninguna plataforma. Sin embargo, otros opinan que Bizum seguirá teniendo ventajas frente a las transferencias bancarias, como la comodidad de usar el número de teléfono en lugar del IBAN, la seguridad de contar con un sistema de verificación de la identidad, o la posibilidad de realizar pagos en comercios online y físicos.

En cualquier caso, Bizum no se queda de brazos cruzados ante el reto que supone la nueva normativa europea. La aplicación, que cuenta con más de 20 millones de usuarios y 35 entidades financieras adheridas, ha anunciado que ampliará sus servicios para ofrecer más funcionalidades a sus clientes, como la opción de solicitar dinero, la creación de grupos para compartir gastos, o la integración con otras plataformas de pago como PayPal o Google Pay.

Así pues, parece que Bizum no tiene por qué temer el fin de su reinado en el sector de los pagos instantáneos, sino que puede aprovechar la oportunidad para mejorar su oferta y fidelizar a sus usuarios. Al fin y al cabo, la competencia es buena para el consumidor, que tendrá más opciones para elegir la que mejor se adapte a sus necesidades.